Cuota, minuto, pantalla,
bien dispuesto maquillaje,
electorado, mensaje,
habla uno, el otro calla.
Incruenta la batalla,
propensa a la autolisonja.
Dos postores en la lonja
disputándose el alijo.
Yo feliz, junto a mi hijo,
pongo mientras Bob Esponja.
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Tu sentido del humor ha vuelto a ponerse de manifiesto con el tan manido debate. Yo no lo vi, lo escuché por radio tomando notas. Me tenía que haber sentado a ver una película de Berlanga.
ResponderEliminarHombre, Emilio, no es lo mismo verlo que escucharlo por la radio, se pierde uno el maquillaje y la contienda gesticular... Ya he leído tu crónica, un abrazo.
ResponderEliminarA mí me quisieron maquillar una vez para un programa televisivo sobre el flamenco y me negué rotundamente a maquillarme. Feo, con manchas y con arrugas, quiero ser yo. Con el alma me pasa lo mismo.
ResponderEliminarTengo mis dudas, Enrique, pero si Bob Esponja se presentara a las elecciones creo que obtendría un resultado magnífico.
ResponderEliminarHe leído la décima que has escrito en "La Torre de Emilio" y me ha parecido genial y con mucha guasa gaditana y sevillana.
Lo peor de todo es el futuro que nos espera.
Buen criterio ese, Emilio, mala cosa el maquillaje y José Luis, yo, desde luego, me planteaba votar a Bob Esponja... La décima del blog de Emilio era una broma simpática, es que me hizo mucha gracia lo de Cazalla y Cantillana, el aplomo y solvencia con que lo dijo y el silencio del interlocutor. Ya tienen tema para el Carnaval. Abrazo a ambos.
ResponderEliminarCazalla y... Constantina, no Cantillana, que he tenido yo también un lapsus.
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