Otra vez viernes, de nuevo,
viernes último de octubre.
Un cielo gris todo cubre
sin claridad ni relevo.
Esta lluvia en la que bebo
le ha movido al sol la silla
y la historia es bien sencilla.
He cerrado ya la puerta
y tengo el alma en alerta
más naranja que amarilla.
Muy bueno, lo he subido también a facebook. Un abrazo. Esperanza.
ResponderEliminarMuchas gracias, Esperanza. Un abrazo.
ResponderEliminarInsuperables tus décimas. Un día, llenas de humor, como la de hoy; otras, llenas de esas verdades que tanto nos están haciendo sufrir; y las más, para invitarnos a una reflexión de la vida, del paisaje y del género humano.
ResponderEliminar¡Que gran poeta eres, Enrique!
Querido Emilio, te agradezco mucho tu comentario, algo abrumado por tu exceso de generosidad. Un fuerte abrazo.
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