lunes, 26 de abril de 2010

Lunes de resaca

En esta ciudad sucede
tras la semana de Feria
que la gente queda seria
y cabizbaja. No puede
aunque por ganas no quede
ni de su cuerpo tirar.
Más alguno, por variar,
un poco más entonado
siente el descanso acabado
y echa de menos el mar.

4 comentarios:

  1. Cada día trae su afán y cada mañana su décima. Gracias, señor Espinelete

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  2. Gracias a Usted otra vez, amigo anónimo. Por un momento pensé que era el mismo comentario de ayer.

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  3. La Feria terminó, la mar comienza.
    Cuántas maravillas en una semana.
    Ya sólo queda un año de recuerdos.
    Flores, caballos y gitanas,
    mujeres de vino y ojos negros.
    Comparto ese deseo de mar
    y esa ausencia de las casetas desmontadas.
    Un abrazo.

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  4. Abrazo grande para ti, Francisco. Me ha alegrado mucho que se estrene de comentarista en este blog con esos versos que conjugan ausencia, gozo ferial, casetas desmontadas y mar compartido.

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