domingo, 19 de agosto de 2012

Gaviota gorda

Pesada, lustrosa, oronda
sobre el oro de la arena,
pico largo y panza llena,
pues más que esbelta, redonda.
La ría, parada y fonda
de tus plumas marfilinas.
Plúmbea y pesada, caminas
sobre rocas y escolleras.
Bien parece que comieras
hamburguesas, no sardinas.

3 comentarios:

  1. No sabe como me he reído leyendo esta décima. Me imagino perfectamente una gabiota regordeta que va de lado a lado porque no puede con la panza.
    Tiene una habilidad enorme para transmitir todo tipo de sensaciones: melancolía, tristeza, dulzura y también tiene la facultad de hacer reir. Un sentido del humor reflejado en su poema, lo cual es maravilloso.

    Mil más sincera enhorabuena.

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  2. Parece un pequeño cuento de una gaviota regordota, con reuma y dándose banquetes en un burger King.

    Me encantó y lo pasé bien mientras te leía.

    Enrique, un beso.

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  3. Euclides y L.N.J., cómo me alegra que mi gaviota gorda os haya arrancado una sonrisa...

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