Compacta, maciza, llena
en la rama del pinar.
Casi a punto de estallar
sobre el oro de la arena.
Con qué aroma se serena
la mañana en cada esquina
cuando el sol que te ilumina,
entre el verde de la fronda,
te fecunda en la redonda
plenitud de la resina.
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Unas obras inacabables y llenas de contratiempos en mi casa me impiden acceder a su blog con normalidad. No obstante hoy me pongo al dia y constato nuevamente la calidad de su poesia.
ResponderEliminarGracias, guanche, y buen viaje.
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