(A propósito de una exposición de fotografías de Semana Santa de Ramón Simón en la Casa del Libro de Sevilla)
Ángulo, perfil, encuentro.
La ciudad en claroscuros.
Magia, cámara, conjuros
de sombras con la luz dentro.
El sueño siempre en el centro
y la vida alrededor.
El fotógrafo, escultor
de la belleza encendida
cuando contemplan la vida
las miradas del amor.
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Si la exposicion es tan buena como la decima que se refiere a ella merecera la pena verla.
ResponderEliminarEnrique, versos encadenados que me dejan aturdido, sin palabra,
ResponderEliminargracias, gracias, y "cienes " de gracias, Enrique.
Tu poema y el de Víctor lo subiré la semana que viene a mi web, al libro " las miradas del amor".Ambos con fotografías.
Un abrazo
La exposición es espléndida, guanche, y distinta de la mayoría de las exposiciones al uso sobre esta temática. Merece la pena que suba las escaleras de la Casa del Libro y la visite. La décima es sólo un modesto homenaje, pero gracias por tus palabras. Soy yo, naturalmente, que sigo teniendo algún problema con la publicación de los comentarios.
ResponderEliminarGracias a ti, Ramón. La exposición, letras e imagen a partes iguales, es realmente espléndida y emocionante y el acto resultó magnífico. Creo sinceramente lo que digo del fotógrafo como escultor de la belleza encendida (y escondida) del instante, como zazador furtivo de esa luz recóndita que hay atrapada en muchas de esas fotografías de las que ayer disfrutamos. Enhorabuena por el trabajo, que es excepcional y de una amorosa delicadeza que salta a la vista, y un abrazo. Enrique.
ResponderEliminarMe he pasado por la exposición y me ha parecido realmente interesante.
ResponderEliminarGracias!!!
Me alegra mucho que hayas disfrutado con la exposición y que mi décima te haya acercado a ella, querido Tito Eliatron.
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