martes, 4 de octubre de 2011

Florecilla para San Francisco de Asís

Sólo el agua en la que bebe
y la hermana golondrina.
Sólo un hombre que camina
aterido por la nieve.
Sólo el sol, sólo la leve
transparencia azul del río.
Sólo un hombre en su albedrío
que la ropa ha regalado
y que goza, sin cuidado,
de la pobreza del frío.

4 comentarios:

  1. ¿No se te ha ocurrido alguna vez hacer un volumen con estas magníficas décimas diarias y publicarlas en un tomo? Son magníficas. Mi padre era un grandioso decimista, modélico y ejemplar. Pregúntaselo a Pineda Novo o a Manuel Lozano. Por eso sé de su dificultad en una composición a la que la gente apenas si presta importancia.

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  2. Amigo Emilio, sí que se me ha ocurrido, lo malo es que no se le ha ocurrido a ningún editor y el asunto no es tan fácil, seguramente por eso mismo que afirmas de la poca importancia que se le presta a la rima y a este clase de composiciones en el contexto actual. No todas, naturalmente, que sería exagerado y excesivo, pero sí que se podrían reunir algunas buscando alguna afinidad temática e intentarlo. Me eccantaría leer algunas de esas décimas de tu padre, de cuya calidad no dudo, me lo corroboren o no esos dos buenos amigos y poetas a los que citas. Un abrazo y gracias por tu generosa lectura.

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  3. Te buscaré algunas para enviártelas. El gran poema se forma conciendo la métrica y la música del poema; una vez conseguido, puedes romper los espacios y enseñarte a ti mismo, pero es fundamental antes el aprendizaje de los estilos en todas las artes.
    Picasso fue un genial pintor clásico en su infancia y juventud, y lo demostró, después rompió todos los moldes para inventarse a sí mismo. Esto es importante.

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  4. Qué cierto, Emilio. Creo firmemente que quizás haya que escribir mil décimas para escribir un buen poema en verso libre. Si yo alcanzara eso, un buen poema en verso libre, ya habría merecido la pena el esfuerzo. Un abrazo.

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